Norma Otilia Hernández Martínez, alcaldesa de Chilpancingo de los Bravo, se reunió con un líder del grupo delincuencial “Los Ardillos”, con quien afirmó que “no hubo ningún pacto”.
Este miércoles, mediante redes sociales, se difundió un video del encuentro que se realizó en un restaurante cerca de Mochitlán. En la reunión se habría presentado la petición de sacerdotes de la región centro de Guerrero —entre ellos el párroco de la catedral de Chilapa de Álvarez, Antonio Salgado Bravo—, para pedir el cese de la violencia en la zona.
Al ser cuestionada sobre el video en el Salón Diamante de Chilpancingo, a donde asistió como invitada al acto de graduación del Colegio de Bachilleres, Hernández confirmó su autenticidad, pero afirmó que fue editado.
“Lo único que puedo comentar que es un video en donde fui invitada a un desayuno con varias personas, obviamente por eso me gustaría que investigara mejor la fiscalía”, dijo.
La funcionaria pidió además que no se politice el tema y pidió a la Fiscalía General de la República (FGR) que obtenga el video completo para aclarar su origen y lo ocurrido
La alcaldesa morenista aseguró que desconocía que en ese lugar estarían líderes del crimen organizado y dijo que se trató de algo fortuito; finalmente, indicó que el hecho ocurrió al inicio de su administración.
El pasado 24 de junio, los cuerpos de siete personas desmembrados fueron hallados en el Barrio de San Mateo de Chilpancingo, a unos 200 metros del Palacio Municipal; junto a las víctimas se encontraron cartulinas con mensajes presuntamente provenientes de la delincuencia organizada dirigidos a Norma Otilia Hernández y al síndico procurador Andrei Marmolejo Valle.
Tras el hallazgo, la alcaldesa morenista se dijo abierta a que las autoridades la investiguen: “No tengo nada que esconder”.
“Los Ardillos” es un grupo criminal liderado por los hermanos Celso, Antonio y Jorge Iván Ortega Jiménez, familiares del diputado local perredista Bernardo Ortega Jiménez. Operan principalmente en las regiones centro y la Montaña de Guerrero.