Hamás confirma contacto directo con EU sobre rehenes en Gaza

De todas las frases de películas que han calado en el imaginario colectivo y forman parte ya del lenguaje cotidiano, es probable que la más inverosímil sea la de que «Estados Unidos no negocia con terroristas». Los gobiernos, y en especial el estadounidense, siempre hablan con sus rivales y enemigos, incluyendo a organizaciones que considera terroristas. Informalmente, a través de canales secundarios, discretamente, de forma que no deje huellas. O abiertamente. Hay veces que los ataca y hay veces en las que se sientan en una mesa, de los Talibán a, ahora, Hamas.

La Casa Blanca ha confirmado este miércoles que está negociando directamente con Hamas, en Qatar, sobre los próximos pasos para la implementación del acuerdo de paz con Israel, que está permanentemente en la cuerda floja. La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, ha admitido que funcionarios y diplomáticos de Estados Unidos han mantenido «conversaciones y discusiones continuas» con contrapartes de Hamás.

La organización ha sido una fijación para Trump desde hace años. En diciembre, después de haber ganado las elecciones, pero antes de jurar el cargo, les dio un ultimátum: o liberaban inmediatamente a los rehenes israelíes capturados el 7 de octubre de 2023 o «desataría el infierno en Oriente Próximo» castigando «a los responsables con la mayor dureza nunca empleada por su país». Hamas no liberó a nadie hasta llegar a un acuerdo a mediados de enero y aun así Trump no movió ficha directamente. Y ahora lo ha vuelto a hacer, pero de forma inesperada.

Unas horas después de que la prensa desvelara los encuentros, Trump reaccionó en sus redes sociales para intentar desviar la atención y congraciarse, con sus bases y con la opinión pública israelí. «Shalom Hamas significa Hola y Adiós. Pueden elegir: o liberan a todos los rehenes ahora, no más tarde, y devuelvan inmediatamente todos los cadáveres de las personas que asesinaron, o se ACABÓ para ustedes. ¡Solo las personas enfermas y retorcidas conservan cuerpos, y ustedes están enfermos y son retorcidos! Voy a enviar a Israel todo lo que necesita para terminar el trabajo, ni un solo miembro de Hamas estará a salvo si no hacen lo que les digo», ha escrito. «Esta es la última advertencia Para sus líderes, ahora es el momento de abandonar Gaza, mientras aún tienen una oportunidad. Al pueblo de Gaza: les espera un hermoso futuro, pero no si tienen rehenes. Si lo hacen, ¡ESTÁN MUERTOS! Tomen una decisión INTELIGENTE. ¡LIBEREN A LOS REHENES AHORA, O HABRÁ UN INFIERNO QUE PAGAR MÁS TARDE!», ha concluido.

La portavoz Leavitt se negó a detallar el contenido de las conversaciones, pero dijo que «el diálogo y hablar con personas de todo el mundo para hacer lo que es en el mejor interés del pueblo estadounidense, es algo que el presidente ha demostrado que cree que es un esfuerzo de buena fe para hacer lo correcto», algo que vale para este caso y para Rusia, ya que Trump dice una y otra vez que hay que escuchar y juntar y hablar con todas las partes de un conflicto.

La información sobre las negociaciones fue desvelada por la mañana por el medio Axios, que explica que la administración Trump está centrada no sólo en la liberación de los rehenes estadounidenses retenidos en Gaza, sin duda la prioridad, sino también en la posibilidad de un acuerdo más amplio para poner fin a la guerra, ya que el sistema de fases actual es muy precario.

Las negociaciones, que se celebran discretamente en Doha la capital de Qatar, las está llevando el enviado presidencial estadounidense para asuntos de rehenes, Adam Boehler, y no tienen precedentes. Estados Unidos nunca antes había interactuado directamente con Hamas, al que designó como organización terrorista en 1997.

«Si bien la administración Trump consultó con Israel sobre la posibilidad de interactuar con Hamás, Israel se enteró de aspectos de las conversaciones a través de otros canales», explica Axios en su crónica. Steve Witkoff, el hombre para todo de Trump, que es quien forzó a Benjamin Netanyahu a aceptar el alto el fuego, y también quien ha visitado a Putin en Moscú, tenía también previsto viajar a Doha esta semana para reunirse con el primer ministro de Qatar sobre las negociaciones del alto el fuego, «pero canceló el viaje el martes por la noche tras ver que no había avances por parte de Hamas», según admitió un funcionario estadounidense.

Trump ha revolucionado sin duda la región. El alto el fuego de Israel y Hamás se firmó antes de que llegara al cargo, pero en buena medida por su presión y teniendo sus enviados un papel principal. Después ha conmocionado a todos con sus planes para «hacerse con el control de la Franja» y expulsar por la fuerza a millones de palestinos, intentando obligar a que Egipto y Jordania, entre otros, los acepten.

Pero negociar directamente con Hamás, más allá de contactos informales y sin ir de la mano de Israel, es algo que ninguno de sus predecesores había hecho antes. Pero la situación es también única. Según Tel Aviv, 59 rehenes siguen retenidos por Hamas en Gaza, si bien al menos 35 de ellos estarían muertos. La inteligencia israelí cree que 22 rehenes siguen vivos y se desconoce el estado de otros dos. De ellos, hay cinco estadounidenses, incluido uno, Edan Alexander, de 21 años, que se cree que está vivo.

«Durante las conversaciones con Estados Unidos, Israel expresó su opinión sobre la cuestión de las conversaciones directas con Hamas», ha dicho escuetamente la oficina del primer ministro israelí, visiblemente incómoda con este giro. Trump está claramente alineado con su principal aliado, ha levantado las limitaciones de entregas de armas y bombas, y dado luz verde a la represión en Cisjordania. Pero al mismo parece tener sus propios planes para la zona, y eso, y estar a oscuras en una charla con Hamás, les pone muy nerviosos.