El Congreso de la Ciudad de México aprobó otorgar una licencia menstrual de hasta 3 días a personas menstruantes, por considerar que los dolores que se presentan en dicho periodo pueden llegar a ser incapacitantes.
La legislación da un permiso con goce de sueldo de dos a tres días a las personas que laboren tanto en el sector público como privado, que sean diagnosticadas con dismenorrea incapacitante.
Además, se prohibe despedir a una trabajadora o coaccionarla directa o indirectamente para que renuncie por razones de género o por ser diagnosticada con dicho padecimiento.
De acuerdo con documento aprobado, la dismenorrea es la presencia de “cólicos dolorosos” en el útero durante al menos 3 ciclos menstruales y cuya evolución clínica varía entre 4 horas hasta 4 días.
Es una de las causas más comunes de trastorno menstrual y provoca dolor en la parte inferior del abdomen, calambre, náusea, vómitos y diarrea en un gran porcentaje de casos, lo que se vuelve incapacitante, argumenta la reforma.
Además, añade que afecta entre 45 a 95% de las mujeres en edad reproductiva. Igualmente, señala que alrededor del 30 a 50% de este sector faltan a la escuela o al trabajo al menos una vez por ciclo y aquellas que no lo hacen, “se ven afectadas en su concentración ante la presencia de dolor que les provoca un rendimiento y una productividad deficientes”.
Para que se implemente la medida, las personas deberá presentar un certificado médico que acredite el padecimiento. Este deberá ser expedido por un especialista en ginecología de alguna institución del Sistema Nacional de Salud. Este tendrá una vigencia de un año a partir de su expedición, al término de éste deberá realizarse una nueva valoración.
Así, presentado por el diputado Nazario Norberto Sánchez, de Morena, el dictamen reforma los artículos 132 y 133, al tiempo que adiciona un artículo 169, de la Ley Federal del Trabajo. Además, se crea el artículo 28 Bis a la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado.
Durante la sesión en el Congreso, la diputada Alicia Medina Hernández denunció que personas menstruantes acuden a laborar “aún pese a presentar dolores severos”, para evitar ser despedidas.
Además, advirtió que este sector puede sentir temor a ser “juzgadas o tachadas como débiles si solicitan ayuda para recibir un diagnóstico y tratamiento”.
“Es urgente dejar de normalizar el dolor de las personas que menstrúan, quienes se ven obligadas a realizar sus actividades cotidianas, aún con una condición física, que en ocasiones las incapacita para desarrollarse física e intelectualmente como en cualquier otro día”, subrayó.
Por lo tanto, recalcó que aspectos relacionados como la menstruación, “así como a las enfermedades agudas o crónicas que puedan producir”, deben dejar de ser “un tema tabú” y tienen que ser visibilizados.
Añadió que se debe de garantizar que las personas mensutrantes puedan vivir dicho periodo como un “proceso natural” que les permita “valorar si hay algo que no está bien en su cuerpo, en lugar de vivirlo como una condena”, subrayó.
A su vez, el diputado Nazario Norberto advirtió que es un tema ausente en las políticas publicas en el país. Denunció que no se toma en cuenta “por razones de género y porque implica el permiso de faltar a laborar”.
En conjunto, también se aprobó la iniciativa presentada el diputado de Morena, Miguel Ángel Macedo Escartín, que otorga licencia remunerada de un día laborable al año a mujeres para realizarse exámenes de mastografía y Papanicolau. A su vez, los hombres podrán acudir para exámenes de próstata.
La iniciativa, que fue remitida al Congreso de la Unión, fue celebrada por la colectiva Menstruación Digna, así como por usuarias en redes sociales.