La Cancillería de Perú calificó las declaraciones de Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, y de Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, como una forma de injerencia en los asuntos internos por lo que los instó a que se ciñan a las normas intencionales.
Las autoridades peruanas señalaron que las expresiones del mandatario mexicano y del canciller en relación al ex presidente Pedro Castillo “no resultan consistentes con los acontecimientos que se han sucedido en días recientes”. En ese sentido, en relación al asunto del asilo político, le enviaron un mensaje a través de Pablo Monroy, embajador de México en Perú.
Mencionaron al embajador “la necesidad de que los estados se ciñan a las normas contenidas en los tratados internacionales vigentes sobre la materia y cumplan con todos los requisitos que los mismos establecen¨, según se menciona en el comunicado oficial que publicaron este 9 de diciembre.
Y es que el 8 de diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador admitió que el ex presidente peruano Pedro Castillo tenía intención de solicitar asilo político a México antes de ser detenido luego de que anunció la disolución del Congreso.
“Habló a la oficina (de Presidencia) para avisar de que iba hacia la embajada y que iba a solicitar el asilo. Busqué a Marcelo Ebrard y le informé. Le dije que hablara con el embajador y le abriera la puerta de la embajada con apego a nuestra tradición de asilo”, señaló en conferencia de prensa.
Con esto confirmó los rumores que comenzaron desde el 6 de diciembre, día en que Castillo fue destituido y en el que ciudadanos bloquearon la embajada de México en Perú para evitar que las autoridades mexicanas dieran respaldo al político. Ante la situación, congresistas peruanos dirigieron una crítica al presidente mexicano.
En respuesta a las palabras de López Obrador, en Perú, el congresista Héctor Ventura de la bancada Fuerza Popular comentó a Infobae que: “Es deplorable que un estado tan importante como el de México tenga esa postura beligerante. [AMLO] no está respetando las normas democráticas, ni considerando las denuncias e investigaciones que afronta [el expresidente]. Es más, su mensaje y actitud inducen al error, a la violencia. Miente en todo momento”.
También criticó que en ningún momento el mandatario mexicano haya puesto en consideración las investigaciones que Castillo afronta en la Fiscalía y el Congreso. “México no debería tener interés en ayudar a un expresidente que rompió el orden constitucional y que no es un perseguido político”, puntualizó.
Por otra parte, el legislador Enrique Wong, militante de Podemos Perú, consideró que, aunque López Obrador está “desinformado, no tiene sentido echar más leña al fuego” en un momento donde, además, la Cancillería peruana ha convocado al embajador Pablo Monroy para transmitirle su rechazo por tener “injerencia en los asuntos internos” del país.
Mientras que Pedro Cateriano, ex presidente del Consejo de Ministros, opinó que “en el fondo la intervención de López Obrador ha desnudado la mentira de Castillo, porque en realidad, él se estaba fugando del país, huyendo de la acción de la justicia luego del golpe de Estado que anunció”.
En días anteriores, la oposición al gobierno en turno en México mostró su inconformidad con la postura de López Obrador en relación a la situación en Perú y ante la apertura de López Obrador y el canciller a darle asilo político.
El Partido Acción Nacional (PAN) tiene claridad en su posicionamiento, tal como lo demostró su dirigente nacional, Marko Cortés, con las declaraciones que hizo el pasado 7 de diciembre. El líder partidista aseguró que la oposición está atenta a la situación en territorio peruano y que México no puede dar asilo a un hombre que representa al populismo y al autoritarismo.
“Estamos atentos sobre lo que está ocurriendo en Perú. El respeto a la Constitución e instituciones son el camino para evitar el populismo, no podemos dar asilo político a quienes dañan a la población y gobiernan de manera autoritaria”, mencionó en redes sociales.
Bajo el mismo tenor se expresó la senadora por el PAN, Kenia López Rabadán, quien auguró para el presidente mexicano el mismo destino de Castillo y de Cristina Kirchner, la vicepresidenta de Argentina que fue condenada a seis años de prisión por el delito de defraudación al Estado mediante licitaciones para la construcción de vialidades. En entrevista con Infobae México la legisladora ahondó en su postura.
“Pedro Castillo y Cristina Kirchner forman parte de la visión que ha estado enarbolando el presidente López Obrador. Son sus amigos, los defiende, no solamente en redes sociales, sino que lo hace de manera institucional […] Justifica lo injustificable de un gobierno que no ha dado resultados ni en Perú ni en Argentina”, señaló.